La juventud
frente a la senectud
es la flor de la vida
que,
lejos de ser cuidada,
es oprimida y repudiada.
Esa flor que hacemos morir
cuando dejamos desamparados los proyectos
y nos empeñamos en poner cerrojos
a cada puerta por la que quieran salir.
De la vida,
la que es de todos
sin pertenecer a nadie
aunque,
pecando de hiriente,
me atrevo a decir
solo es de la muerte.
La juventud se enfrenta,
la juventud se encara,
pero también se cansa,
de dar y no recibir nada.
Acabar con el movimiento febril,
cansado y teñido de añil.
Como un cielo quemado por el sol,
como un joven encarcelado sin razón.
Interesante!
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¡Maravillosa prosa, en formato de denuncia! La senectud de la vida; debería recordar sus propios sueños o proyectos de vida en su juventud, para entender que solo debe alentar a aquell@s jóvenes en todo aquello que emprendan, buscando VIDA en cada paso… Un cálido saludo.
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Me alegra mucho que mi texto haya podido hacerte reflexionar de esa manera. No puedo estar más de acuerdo con lo que propones en tu comentario!! Gracias por leerme🤗
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la juventud como un mal pasajero…o al menos ese es el consuelo de los que la encierran y atacan…besos al vacío
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Realidad pura. Gracias por comentar tus impresiones ✨
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