Novia por…

Amaranto se agarra la cabeza, sentado en la mesa de su bar favorito. Resolvió tomarse una semana libre en los rodajes. Le viene bien tomar un poco de aire puro. Aunque él, de puro, no tiene mucho; muy por el contrario, le atraen los excesos. Mientras termina su cerveza se le acerca una gringa solitaria.Sigue leyendo «Novia por…»

Ojitos jónicos

Ojitos jónicos esculpen los míos corintios cuando, en realidad, dóricos.   Y no es que me menosprecie sino que mi mejor ornamento es tu mirada regalada.   Por eso dicen que la belleza está en los ojos de quien mira, porque a mí tus pupilas de miel me enardecen. Si alguna vez la poeta fueSigue leyendo «Ojitos jónicos»

A medio camino

Uno, dos, tres segundos. No ha querido seguir contando, pero a ratos siente que el tiempo es tan denso que puede palparlo. Ha esperado tanto… Y ahora parece que los minutos se alargan con afán. Un cambio de circunstancias y todo patas arriba, un abismo entre los dos. Ya no es él el lugar enSigue leyendo «A medio camino»

Ducha de pena

Cae y se desliza. Se siente, pero escurridiza. Parece firme, pero pide paso. Intento abrazarla, pero no hay caso. Es como la esperanza que se me escapa entre los dedos. Esperanza, ¿adónde te fuiste? Desespero esperando que me mires. Nada más que eso espero. Y nada menos. Porque la manera que me mirabas en laSigue leyendo «Ducha de pena»

Oasis

Un aire desconocido puede despertar el alma. Una mirada robada, casi por casualidad, puede convertirse en tesoro, durar por la eternidad. Hay calles que serán siempre una forma de volver, hacer un viaje en el tiempo hasta la primera vez que, inconsciente de la trascendencia de ese simple recorrer, viviste alguna experiencia grabada a fuegoSigue leyendo «Oasis»

Última carta al viento

Finalmente,cráneo abierto, ojos cerrados.Escucho el silencio del disparoque me ha dejado tirada en el suelo.El pasto mojado anochece.Miro nublado, perono volverán a llover mis pupilas. He vivido sola,he comido sola,he dormido sola,y…he muerto sola,pero les juro que no fue la soledadla que hizo del jardín mi pedestal. Me he podrido viva,porque no he podido yaSigue leyendo «Última carta al viento»

Qué tímida manito

No me animo a mirarla. Ni menos, a nombrarla. Pero allí está, la mano de ella extendida hacia el costado. ¡Dios mío, qué momento! Estamos ella y yo acá, sentados en el mismo asiento del tren, y no me animo. ¡Pensar… la de veces que pasé a propósito frente a la puerta de su casa!Sigue leyendo «Qué tímida manito»

Perdida en sus ojos

Le podría jugar sucio al azar por él Sólo por mirarlo me atrevo a desafiarlo, Podría ganarle si llegara a retarlo Él es suficiente motivo, tengo fe de lograrlo. Esos ojos Son grandes y pequeños, Son mi talismán de la felicidad Escondían un futuro que no imaginaba Y me regalaron el presente que un díaSigue leyendo «Perdida en sus ojos»