instrucciones para no darse a querer

i.
de cuando en cuando ves lo que quieres, lo que debes: lo prohibido.
ii.
espérame, aunque no sé si llegaré a tiempo para defraudarte, para propasarme contigo.
iii.
padezco de insomnio—según el galeno, soy alérgico a los sueños.
iv.
corrijo, ya que no siempre estoy únicamente cometiendo faltas ortográficas.
v.
tengo que ponerme las pilas antes de que me las pillen.
vi.
soy egoísta: no me gusta contagiar al prójimo.
vii.
son disparos al aire, las pajas.
viii.
no pude disimular la decepción, cuando el doctor chapatín me dijo que me quedaba vida para rato, que me dejase de ñoñería y me pusiera los pantalones, que ya hacía rato que yo había perdido mi derecho a morir como un hombre, me entraron ganas de llorar.
ix.
no puedes deshacerte de ella: la cara es la mejor y peor de las máscaras.
x.
harta de ser mirada, admirada, la luz aspira a ser tocada, manoseada.
xi.
la luz se hace sentir en la noche; de día pierde su tiempo prestándonos demasiada atención.
xii.
compartir, antes de partir, es la tarea.
xiii.
intervenir sin echar a perder el encantamiento es el meollo.
xiv.
para que nos demos la mano, la lluvia nos acerca las ramas de los árboles.
xv.
diferencias: la luz es global, el sonido local, la oscuridad universal.
xvi.
tranquilo: quiero que te ayudes, no, que me ayudes.
xvii.
parte de ser responsable es también saber ser un hijo de puta, saber ser un irresponsable de cuando en cuando.
xviii.
desbalance: sobrestimamos la niñez, subestimamos la adultez.
xix.
ser diferente no es excusa ni razón para ser indiferente.
xx.
ahondar en el vacío, ahondar en él hasta que brote como un géiser, hasta hacerlo venir.
xxi.
demos gracias: hay culos que nos hacen prestar atención a sus caras.
xxii.
¿prefieres desnudarte, o que te desnuden?
xxiii.
un pepino importa si está medio lleno o medio vacío el vaso, lo importante es que tenemos agua y que no tuvimos que robarnos el vaso.
xxiv.
un intimismo que intimida porque te atrae y repudia a la vez, porque desnuda y te gusta, porque te imagina en lencería para aplaudirte.
xxv.
quise agarrarte el culo, pero me contuve: hubieras malinterpretado mis buenas intenciones.
xxvi.
hay que cerrar bien los ojos y contar hasta diez, luego abrirlos con cuidado para no perder la cuenta.
xxvii.
detesto cuando se la espanta, cuando en el poema se menciona a la poesía.
xxviii.
dándole un chance al amor: obvio que estoy quemando mis últimos cartuchos.
xxix.
por no dignarse a visitarme, la asalté a punto de cuchillo a la esperanza.
xxx.
no dejes que la desilusión te apague tu velita de ilusión—poned huevos y protégela para que luego puedas tú apagarla cuando te llegue el turno de mandarla a la porra.
xxxi.
cuántos comemierdas en la calle, me digo, y, claro, yo soy el primero de ellos.
xxxii.
psicología: mi deber es hacerte sentir mal, no es hacerte sentir bien cuando la cagas.
xxxiii.
dicen que sin tetas no hay paraíso, pero sin ellas tampoco es posible el infierno.
xxxiv.
hablando de tenis: ¿será la eyaculación precoz un error no forzado?
xxxv.
citas y citas y no necesitas de ellas, no sabes el flaco favor que ellas hacen a tu composición.
xxxvi.
no sabes lo mucho que me alegra que te esté yendo bien, así no vas a tener que volver a molestarme.
xxxvii.
un momento de inatención te pido, luego te doy permiso para que me llames la atención.
xxxviii.
es como para morirse de la vergüenza, un suicidio fallido.
xxxix.
entre el culo y tu mano—una delgada muestra de papel higiénico.
xl.
entre acostumbrarse y desacostumbrarse qué hijueputa juego de palabras, de deberes.
xli.
la poesía no necesita de instrumentación.
xlii.
vulcanología: es un volcán activo el culo, digno de continua observación y estudio.
xliii.
advertencia a los poetas: la palabra a veces nos echa a perder la ocasión.
xliv.
ahíto de verme en el espejo, prefiero la ventana o la puerta por donde tú entras y me pillas con las manos en la masa.
xlv.
cuántas selfis para constatar lo obvio.
xlvi.
creo que me he ganado el cielo: una recompensa por mi cabeza se ha puesto en juego.
xlvii.
historia: lo preocupante es que el olvido le está ganando la partida al recuerdo.
xlviii.
reunión con el presente: estoy hasta la coronilla de la culpa del pasado, de la inocencia del futuro.
xlix.
por si las moscas, me froto siempre los ojos con la izquierda.
l.
arréglate para que luego me des el gusto de desarreglarte.
li.
muy al contrario, la gente es mucho más lela de lo que se piensa.
lii.
hay que agradecer: nunca es tarde para meter la pata.

c. a. campos
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