A E.B.P.
Las manos que en mí viajan
no son las que recuerdo.
Busco el temblor fino.
Pienso que es tu voz,
como vibración de las raíces
bajo tierra.
No te escucho.
Persigo islas
que sólo encuentro en la memoria
de mi pelvis.
Cierro los ojos,
me entrego a la nostalgia.
Cuando mi piel estalle,
podré decir que me has tocado,
aunque de aquel estruendo no te cuente.

Octavio Castillo Quesada
@o.castilloquesada
Leer sus escritos


Deja un comentario