Sin esperanzas como las rocas en agua,
el corazón de roca late como fuego sin llamas,
las llamas queman como la nieve de verano,
y el verano caliente como amor que no se siente.
Las palabras son muchas como la lluvia,
una lluvia como lágrimas que inundan,
lágrimas sin desdén como una fiesta de un va y ven,
y la fiesta sin música como palabras que aborregan.
Lo falso nos domina como los pasos sin rutina,
pasos leves como alas que no chocan,
alas de águila como el fuego de los corazones jóvenes,
corazones que laten como el mudo que voz alza.



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