Queridos caballeros no se molesten en abrir y cerrarme la puerta que yo sola puedo abrir y cerrarla, abrir y cerrarla todas las veces que haga falta.
No me digan que me envidian por entrar gratis a una discoteca que no creo que les haga gracia que les trate como carne fresca tirado a una manada de bestias, para ver quién les devora antes y mejor. Que llegamos al punto en el que la Real Academia Española decide que fácil es el adjetivo exclusivo para las MUJERES que mantienen relaciones sexuales y yo solo puedo decir:
Real Academia, se nota que la mayoría de sus lingüistas son hombres y que aquello que decían que la lengua es el espejo de la sociedad es totalmente cierto. El machismo sigue vivo, intentando acabar con nosotras, callándonos e infravalorandonos. Así que tóquense los cojones que a mí nunca me gustaron esas escenas en las que uno arde y el otro mira como se quema. Me llamaron gorda, delgada, bajita, demasiado alta… intentasteis hacernos mil pedazos y nosotras, en ocasiones, caímos, pero, en muchas otras, cogimos los pedazos y nos reconstruimos volviendo con más ganas, con más fuerza.
Intentasteis taparnos la boca, robarnos el derecho a votar supongo que por el miedo al qué pasará y es que, el titiritero nunca quiso dejar que las que fueron sus marionetas abrieran la boca y crearan su propio show.
Esto va por vosotros, sí por vosotros que intentasteis hacernos cenizas y estáis tardando en ver que nosotras estamos en llamas, y ninguno de vosotros podrá apagarlas.



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