Una cosa solo puedo decir,
que del mármol a mi cuerpo
solo hay unos grados,
los que calibran el temperamento
de las tan tediosas afrentas
que entre el espejo y la realidad
(esa que ahora mismo me compone)
se han llevado a cabo.
Una cosa para pronunciar de lunes a domingos,
de principios a fines de cada mes.
Una sola cosa en este instante
que se alarga intemporal,
es únicamente lo que puedo decir.
Uno,
¡yo combatiente!
Cosa,
el miedo jamás tiene nombre.
Una cosa:
yo y mi terror luchando contra el nombre.

Miriam González
@mer_adonai
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