Cuando la noche
puebla nuestras venas
las palabras son antorcha
que hace visible el camino.
Envuelve mi cuerpo
paráfrasis de alevosía
en ese diálogo sinusal
de placeres escondidos
convertirme las sombras
de nuestra vigilia en versos
fluir del magma inquieto
que nos atraviesa.
Esboza la celosía
que arremolina
el respirar legítimo
de quien el placer ansía
dejá que seamos
el polvo que acomoda
los vocablos incómodos
la pericia destraba lenguas.
Mírame de soslayo
y átame de lujuria
con tus manos
en mi inconsciencia.
Mirame de frente,
si sabés que nada esconden
los que escriben en la conciencia
de la locura.

Coti Molina
@cotimolgo
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Óscar Quiroga
@quirogautor
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