Pulcra jaula en movimiento,
cápsula de aspiraciones y desencuentros
que abre sus puertas al placer de extraños y caras conocidas.
Nadie se queda más de la cuenta en aquel frío y asfixiante lugar,
vagos ecos de las voces que lo habitan parcialmente
chocan en sus rincones olvidados.
Es indiferente cuántas veces suba o baje,
pues su destino lo manejan manos silenciosas
de vez en cuando acompañadas por el error y el azar.
No existe descanso alguno en su interior,
ya sea por el sofocamiento producido por el exceso de usuarios,
o por la falsa calma que ronda en su vacío.
La idea de un punto de partida y uno de llegada se vuelve trivial,
solo le queda seguir su rutina sin sentido de la mejor manera posible.
Hermoso, me encantó
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¡Muchas gracias!
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Terrorífico y genial. Enhorabuena y muchas gracias.
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Te lo agradezco, y aprecio que te haya gustado mi escrito.
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