Intento escribir lo que siento,
algunos minutos pasan,
y no puedo,
no lo encuentro,
busco en los escondites de mi interior,
aquellos sellados por compasión,
y tampoco lo hallo,
no tengo explicación,
sigo incansable indagando,
aunque sean solo unas leves palabras,
unas huellas borradas,
un teorema muerto,
una soledad agitada,
el ruido en el silencio,
aunque sea solo un simple acertijo,
un motín en los sentimientos,
una tímida codicia,
un suspiro descubierto,
aunque sea solo la mirada robada,
la pelea del abatido,
la disputa de una lágrima
que se niega a caer en el olvido,
aunque sea solo el roce de la piel castigada,
el deseo apartado,
la angustia derramada,
el beso no dado,
el perdón que creí otorgado.
Intento escribir lo que siento,
pero lo dejo,
no es el momento,
no lo encuentro.

¡Buena entrada! Como tu…como nosotros…no existe bloqueo para los poetas, solo invocando su presencia hace poesía. No resulta maravilloso? Un cordial saludo.
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Muchas gracias por tu comentario, me hace ilusión leer algo así. Saludos.
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