Libertad

A veces me gusta viajar, de lado a lado. Encontrar en los rincones aventuras nuevas y olvidarme de los motivos que me llevaron a viajar.

A veces voy más lejos, otras, por cautela, me quedo cerca. Pero siempre estoy en movimiento y mi ser lo sabe.

Lo sabe porque me encuentro con él en cada esquina, aunque intente esconderse.

Lo sabe porque siento cómo voy creciendo a medida que descubro un poquito más de mi mundo.

Lo sabe porque me evoca pensamientos que me animan a seguir, diciéndome que estoy haciendo lo correcto.

Y a decir verdad, no sé muy bien si esto es así, pero sentir la libertad tan cerca tiene que ser una señal de que todo marcha bien.

Es por ello por lo que no paro de viajar dentro de mí, conociéndome a cada minuto, odiándome por momentos y queriéndome cada día un poco más.

Esa es la libertad que jamás me podrán arrebatar, la de encontrarme, conocerme y amarme sin parar.