el día que muera un poeta
no pasará nada
no se secarán los árboles
ni morirá el mar
la lluvia seguirá siendo lluvia
los señores seguirán ensimismados
el globo del niño será eso y no
una esperanza fugaz ni un deseo
o un futuro
será solo un globo rojo o amarillo
o verde
un tonto juego en el viento
las palabras serán ladrillos
de muros irrompibles
el poeta seguirá creyendo
que construyó ventanas
y los valientes las usarán
para mirar al cielo
Hermosa entrada! Por ello los poetas; perduramos aun en papeles viejos y amarillos. Porque les hacemos ver a los otros; a través de las ventanas no solo el cielo sino también la vida. Un cálido saludo.
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Precioso texto!
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Y habrá otra vez un cielo azul
y nada detendrá el próximo aguacero
Bello poema
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