Al Lector
El viejo carpintero que trabaja la madera,
Dándole forma con sus duras manos
A la construcción de un barco se esmera,
Pero no lo prepara para los mares lejanos.
No: si este buen señor acaricia la madera
Es para gozar él mismo con su obra
Y así sustentar su alma de la más bella manera,
Haciendo arte por arte cuya utilidad sobra.
Creo que yo tengo madera de carpintero:
Como ése, hago rimas para gozar con ellas,
Leo cada poema asimilándolo entero
Para cultivar mi huerto con palabras bellas,
Después lo comparto contigo: abierta he dejado
La portada de mi libro para que tú, Lector, la abras
Y que puedas deambular en el jardín cultivado
Por este humilde artesano de palabras.
Poema publicado en Poesía bipolar (2018, Caligrama)
Henri Berger Martín
@h.b.m._lenfantseul
Leer sus escritos