De repente suena un graznido estridente.
Aviso de bomba.
Aquí no, en Colombia, en Gaza o ahí pasada la valla.
Las redes acercan los insomnios.
En este colchón nos abrazamos.
Y es que hay dos carrascas cuyas ramas se buscan sobre la carretera.
Forman puente para cruzar
y techo breve.

Julio Expósito López
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