¿Sabes?
Me gustas
como todo aquello
que anhelamos en silencio:
lo ilícito,
lo imposible,
lo arriesgado,
excitante… un sueño
clandestino y fustigador.
¿Sabes?
Me gustas
como aquellos niños miran la piruleta
que el dentista les prohibió.
A escondidas la degustan.
A escondidas te deseo yo.
¿Sabes?
¿Y si de una vez me creyeses
cuando te digo que, me gustas?
Que podría dedicar mis años
a poder conocerte y abrigarte
cuando el invierno te toque los huesos.
Que para mí no hay juegos de mesa
y dejaría mis cartas sobre ella
por abrir las puertas que me lleven hacia ti.
¿Sabes?
Me gustas.
Y te paladearía como el último barril
de alcohol escondido en Chicago.
Te pintaría el alma, desnuda.
Mis pinceles llevan tu nombre grabado,
tus ojos pequeños, tus rasgos,
y los rizos de tu pelo despeinado.
Mis láminas quedaron sin colorear.
Y aquí tengo los lápices recordando tu boca
cuando los saco a dibujar.
¿Sabes?
Debería habértelo repetido…
… que me gustas.
Aunque andes despistada
diciéndomelo todo si pregunto
y no me dices nada.
May Olivares
Blog de May
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