Letanías adolescentes

¿Tienes novio, dulce ilusión humana,
linda princesa juvenil y bella,
resplandeciente y cariñosa estrella,
exquisita preciosidad romana?

¿Tienes novio, finísima figura,
imagen hechicera y seductora,
purísima mujer torturadora,
viento del este que nos trae frescura?

¿Tienes novio, aparición de diosa,
pintura virginal y femenina,
otrora sabia majestad delfina,
existencia querida y luminosa?

¿Tienes novio, metáfora perfecta,
esperada y muy justa primavera,
sonrisa amable que me regenera,
muchacha de entre tantas la correcta?

¿Tienes novio, encanto que cautiva,
rostro perdido en un panteón divino,
placer caro y culposo, clandestino;
escultura que aprecio en perspectiva?

¿Tienes novio, sílfide de palacio,
recuerdo delineado por los años,
calidez que alimenta a los extraños,
musa rojiza de cabello lacio?

¿Tienes novio, heroína de novela,
afecto mío que resguardo ansioso,
titilar que titila poderoso,
romance retratado en acuarela?

¿Tienes novio, dama de aristocracia,
perfume erótico de madreselva,
esencia que ojalá no se disuelva,
perfil lleno de bendición y gracia?

¿Tienes novio, hada de los jardines,
dorado, elegante y caro espejo,
simétrico y vivísimo reflejo,
terrena cuidada por querubines?

¿Tienes novio, devastación más tierna,
poema escrito con la mejor poesía,
rosada claridad que se hace mía,
instinto inteligente que gobierna?

¿Tienes novio, legendaria bondad,
regenta sin nobleza del castillo,
brillante joya que desprende brillo,
bien pulida y templada dualidad?

¿Tienes novio, inefable poetisa,
morena ardiente de las piernas largas,
tormenta eléctrica con tus descargas,
oportuna y consoladora risa?

¿Tienes novio, tú, viva gentileza,
promotora de la paz ante la guerra,
misterio del misterio de la tierra,
ejemplo perfecto de belleza?

No tienes novio, cielo, no lo tienes,
vives bien sin tenerlo y sin desearlo.
Maldita suerte porque, sin pensarlo,
fue a juntar mis carencias con tus bienes.