¿Nos echamos unas risas?

«La raza humana tiene un arma muy eficaz: la risa». Mark Twain ¡Un chupito de endorfinas, por favor!, que en la risa bailan el alma, el cuerpo y la mente. Baile atropellado entre pasos de risas escandalosas, contagiosas y hasta excéntricas; las que desfiguran el rostro mientras te contorsionas y hacen que te duela laSigue leyendo «¿Nos echamos unas risas?»

Me puse guapa para ti

Aquella mañana de sábado se maquilló más de lo acostumbrado, ¡la ocasión lo merecía! Su pelo recién lavado y cuidadosamente recogido en un moño alto delataba la altura de sus ambiciones y esperanzas. ¡Esta vez nada ni nadie se interpondría entre ellos! Miró con desprecio el teléfono móvil de él que reposaba sobre la mesitaSigue leyendo «Me puse guapa para ti»

Confinar a la flor del naranjo

Qué sutil el aroma de nuestros besos furtivos de callejuelas en flor… Pero si de mí te alejan ¡qué violenta tu ausencia! Quisiera haber sido yo, ¡para ponerte a salvo del olvido!, quien robó la primavera. Y bordar tu rostro blanco y escribir nuestras consignas y tu código de honor en pétalos por bandera. ProtegerSigue leyendo «Confinar a la flor del naranjo»

Carro de batalla

¿Qué compro? ¿Para qué lo compro? ¿Dónde ha sido elaborado/recolectado? ¿Bajo qué condiciones laborales y medioambientales? …Los eslabones de la cadena productiva y de comercialización están manchados muchas veces de vulneración de derechos, trabajo infantil, sobreexplotación de recursos naturales y contaminación ambiental.En un mundo globalizado y mercantilizado, la justicia social, económica y medioambiental pasa porSigue leyendo «Carro de batalla»

Llanto en los cristales

Huele a nuevo y a penumbrade faroles indecisos;a cristales que lloran sin tristeza,a regalo inesperado.Huele a tinta que sangra poesía;huele a víspera de todo,a ganas de empezar.Huele a calle acurrucada,a murmullos en los charcos,a niño que sonríe por vez primera.Huele a campo engalanado,a festines en las ramas,a raíces que celebran.Huele al agua con la tierra,hueleSigue leyendo «Llanto en los cristales»

Eres diciembre

¿Será diciembre cuando vuelvas? Eres diciembre, eres otoño de perenne desnudez. Eres la hoja desprendida de la piel sin primavera. Eres diciembre desolado blanco y escarcha. ¡¿A qué vuelves en diciembre?! … si solo sabes vestir de ausencia los jardines. Eres diciembre famélico yermo sin ti. ¿Eres mi cuento sin hadas? …¡sin título ni bosqueSigue leyendo «Eres diciembre»

Soledad

¡Esta soledad puntiaguda! Esta soledad impuesta que no sabe contentarse acompañada. Es tan grande mi soledad que rebosa en todas direcciones. ¡Esta soledad punzante! Esta soledad que se busca y no se reconoce frente al espejo. Es tan antigua mi soledad que se ha tornado fantasma. ¡Esta soledad que no se acepta! Esta soledad queSigue leyendo «Soledad»

Antiamor

A.M.O.R Combinación pegajosa de fonemas dispensados a granel en bodas y poemarios. Te cuelas de ruido y chaqueta  en las fiestas de silencios  y vacíos necesarios. Todo lo pringas de merengue con lazos rosas. Sopa de letras seca sin sal… ¡A.M.O.R hasta en la sopa! ¿Por qué te llaman A.M.O.R…? Brindis sin vino ni copa.Sigue leyendo «Antiamor»

Un tipo eXtraño

Altamente eXtravagante, arrogante y eXcesivo, no hay eXcusas para el hombre que eXagera su delirio. Me eXcluyen de entre los cuerdos, me eXtiendo hacia el desvarío; mi locura ineXorable, mi razón en el eXilio. OXidado tengo el seso, el seXo tengo perdido; en lugar de aXilas, alas… eXecrable ángel caído. No me eXculpan las iglesias,Sigue leyendo «Un tipo eXtraño»

Invito a verbos

¡Ven! Acompáñame esta tarde… invito a verbos. Aparca tu soledad junto a la mía deseando que no estén cuando volvamos. Disolvamos prejuicios y deberes en una taza de café con letras. Te quiero a cambio solo hecho risa. Seamos creadores de historias reales e inventadas, tan ciertas como los recuerdos de nuestra mala memoria. ApoyaSigue leyendo «Invito a verbos»

A mis abuelas

Estos versos están dedicados a las luchadoras anónimas: mujeres que, sin haber destacado en el ámbito público, fueron columnas indispensables para la sociedad de su tiempo.   Quiero tu nombre en las calles porque parías en tu casa, porque viviste una guerra y libraste mil batallas. Quiero tu nombre en las calles por tu victoriaSigue leyendo «A mis abuelas»

Restos de luna

Levanto mis ojos al cielo, me salpican los restos de luna que le han sobrado a la noche. Respiro los colores en suspenso del único amanecer que tendrá este día. Sonríen los trinos, borrachos de Vida. Me dejo arrastrar por las olas del momento irrepetible; lleno mi cesta de instantes y sensaciones. Se ensanchan misSigue leyendo «Restos de luna»

Porque eres

Mujer, porque de tu vientre nacen todas las historias  que guían a la niña que llevamos dentro, a ti dedico mis cuentos. Porque misterioso como la música es tu sagrado cuerpo, mi canción a tu música ofrezco. Porque tu vida es un poema de amor imprescindible, en ti declamo todos mis versos. Porque eres, porqueSigue leyendo «Porque eres»

Pellizcos al subconsciente

Tú que le hablas a la noche entre los pliegues de un susurro. Desdoblas historias flotantes, arrancas pellizcos al subconsciente, agotado de berrinches. Tú que reptas, vuelas, cantas, gritas, nadas, añades cerdas a tu escoba en cada luna. Llueves estrellas sobre el estío. Riegas con soles tu invierno. Tú que te hundes en el regazoSigue leyendo «Pellizcos al subconsciente»

La palma del corazón

Llámame conformista porque toda mi felicidad cabe en una puesta de sol, en un rebaño de ovejas, en la bondad de mi perro, en las risas compartidas, en una mirada cómplice, en unos zapatos cómodos, en fruta recién cortada, la contorsión de un gato, el olor a campo, el tequiero de mis hijos, las cancionesSigue leyendo «La palma del corazón»

Cuando muera el hielo

Morirá el hielo y esparciremos sus cenizas sobre nuestros labios resquebrajados, heridos por la sed. Llegará el deshielo con su fiesta de charcos y brotes. Nadaré en tu agua entonces y me tenderás tu cielo para volar. Caminaré descalza sobre la mullida calidez de tu arena. Morirá tu ausencia y brindaremos con licor de besosSigue leyendo «Cuando muera el hielo»

Cubierta de espinas

Lo siento, no quepo en tu silueta, estoy cubierta de espinas. ¡No, no lo siento en absoluto! No quepo en tu silueta ni en ninguna otra. Ni siquiera me siento cómoda cuando mi sombra me toma las medidas. No quiero ganarme la vida como arcilla o como agua. Estoy cubierta de espinas. No pido respeto,Sigue leyendo «Cubierta de espinas»

Plañir

PLAÑIR Maraña de uñas ponzoñosas, arañas las entrañas de los años teñidos de añil. Haces añicos, huraña, el presente que extraño, el futuro añorado —engañoso es el mañana—. Bañas con sangre, con saña, cuanto empeño mi puño, firme o trémulo, desnudo de hazañas, señala. Extraño muñón de puñal cercenado tu llanto sin eñe, tu pañoSigue leyendo «Plañir»

Insomnio

Mastico las partículas de la eterna noche seca; estrecha noche larga de letras despeinadas. Bostezan los recuerdos, la vida se pasea entre mis dedos. Noche de patas resbaladizas, plomo y luna incandescente. Trenzan las palabras atroces segundos desfigurados. Trazan poemas las agujas del tiempo detenido. Hieden las noches muertas, hastían los días sin noche. SangranSigue leyendo «Insomnio»

Incienso

Incienso de ideas desteñidas. Humo que no es más que humo procedente de un corazón siempre ardiendo. Deseo, pasión, búsqueda. Pregunto, divago, respondo, dudo… Se desvanece. Parece que llegas, parece que toco. Parece… desapareces. Lanzo incertidumbres con la esperanza de que nadie las despeje. No quiero renuncias, quiero encuentros. No añoro los límites de laSigue leyendo «Incienso»

Al hijo desaparecido

Tu ausencia ya no te soporta, las palabras no consuelan. La música, cuchillas afiladas en el desierto de mis venas. Mis ojos son diluvio de cielo enfurecido. La saña de este dolor bebe la sangre que mi pulso pierde a raudales; salta sobre la tumba, aún palpitante, de un corazón que agoniza. ¡Arráncame de míSigue leyendo «Al hijo desaparecido»