A mí no me engañas. Te apetece la tangente de ese y cualquier escote.Te provoca la parábola barata y te tienta la geometría corriente. Pero es la circunstancia aleatoria lo que te deleita.Son pensamientos sin coordenadas lo que te cautivay la complejidad numérica lo que te resta el sueño. Y para tu mala fortuna meSigue leyendo «Ecuaciones atemporales»
Archivo de categoría: Isa Serrato (México)
Tropezarnos con nosotros mismos
Me parte admitir que peinarnos desvelosno es suficiente para trenzar estrellas. Mi pecado es inventarme historias por la mirilla,mentiras de periscopio,tapizar de cuentos tus pupilas nunca submarinas. Querer sembrar perlas en charcossólo para decepcionarme una vez másy contemplar el nácar espumarse. Pero, ¿quién podría culparme?Si de verdad estoy harta de pedalear relojesy de intentar torcerSigue leyendo «Tropezarnos con nosotros mismos»
No sé si es Amberes o Viena
No sé si es Amberes o Viena y qué poco dejaron de importar los suelos que nos calzan cuando se trata de encontrarnos otra vez. Sólo sé del chisporroteo que el cielo llora, que tanto me moja los hombros y me empapa de impaciencia las ideas mientras te espero. Sólo sé del bolero argentino queSigue leyendo «No sé si es Amberes o Viena»
A través de la ventana
Nos vemos a través de la ventana:un pasado tan impreciso que se empaña en los hubieras.De nuestras venas torcidas se desraízan los hilos que sujetan el curso del tiempo.Las flores se trenzan cadenas y se desenredan libertad.Nos tomamos de las manos noventa y nueve veces ningunapara soltarnos siempre que te quedas. Hay un acorde enSigue leyendo «A través de la ventana»
Irme lejos
Se escarchóla última violeta. Otra vez, el amorse confesó índigo. Me escondióen el bolsillo de su saco,en la cuesta del latido,donde refugiaal último picaflor de papel. La tierra siempre es tibiay se acabanlas migajas de luzen mis ojos. Improvisé para el inviernoun cuento de origami. No imaginéque a todos nos agotó la primavera. Finalmente, renaciódeSigue leyendo «Irme lejos»
Me voy
Vienenlas dunas de vinilo y corrientes fonográficas,la resonancia tornasol y el eco ultravioleta,la polifonía del ocaso. Ya vienen:la partitura del médano,la danza clandestina,bailar descalzos sobre el caos,la enésima identidad del ser. Entre umbrales submarinos, pentagramas en la arena,mi reflejo tecnicolor y las rutas marítimas que perfilan mis arterias,me descubrí:Diosa de mi propia existencia. Me voydeSigue leyendo «Me voy»
Los amantes olvidados por Dios
Esta memoria comienza como principian y concluyen todos los reencuentros de los amantes olvidados por Dios: con un taxi. Se siente en las rodillas que flaquean, en las ansias que transpiran las palmas de estas manos impacientes, en la ilusión que encapota mi cordura y en cada canción de radio que acompaña este traslado deSigue leyendo «Los amantes olvidados por Dios»
Mon petit
Mon petit, alguna vez tomamos una clase juntos pero tuve que viajar 4,877 km para conocerte, ¿te imaginas? Somos los últimos que resisten este restaurante pero fuimos los primeros en dimitir amores a la carta. La mesera recoge la cristalería que queda, pero dime ¿quién se va a llevar estas ganas de encontrarte siempre enSigue leyendo «Mon petit»
Eres amapola
Para ti, que eres a veces. Que siempre renaces de ceniza. Que escuchas y no dices nada. Lobo sin geografía y depredador de continentes. Me aventuro al talón de tu azotea. Contra toda brújula, principio lógico y sentido común. Me atrevo a taladrar el techo de tu rascacielos, para que por fin te empapes deSigue leyendo «Eres amapola»
Hasta que la última hoja caiga
«¿No es el otoño más bonito que has visto?» El frío nos besa la piel y tu pulgar arrulla mi mejilla. Tantas veces caminé aquel Boulevard y fue hasta hoy que visité este parque sólo porque tus manos me invitaron. No importa qué pidas, mientras lo pidas con las manos: es tuyo si lo reclamasSigue leyendo «Hasta que la última hoja caiga»
¿No lo sabes ya?
Estoy cansada de merodear por los pasillos sonámbulos de mi vida.Fingir que no te busco en cada túnel, callejón y pasadizode este laberinto enrarecido que comparto con tu recuerdo.Pretender que no son estos versos para quien siempre lee mis cartas. Te escribo porque estoy harta de mentir con la verdady explicarte que esto no podríaSigue leyendo «¿No lo sabes ya?»
Háblale de mí
Será que tal vez ser reina nunca es suficiente si sólo es en tablero. Ni a mí que me aficiona el juego, me basta ser trebejo, una pieza más. Si se trata de saltar escaques, esquivar jaques y esperar por siempre en la casilla veintidós, le cedo mi lugar para tu próxima jugada. Nunca heSigue leyendo «Háblale de mí»
Confesiones
Les confieso que por cada puñado de verdades, una siempre no lo es. Confieso también, que ustedes me promulgan las tragedias más absurdas.La verdad, por estatuto, es siempre mucho más simple.Rescindir mi contrato con la primavera fue el menor de mis problemas y la desdicha más breve.Lágrimas de trámite para una estación que no entiendeSigue leyendo «Confesiones»
A todos los que quieren verme arder..
A todos los que quieren verme arder hasta que se me calcinen las entrañas, permítanme ser yo quien les regale el cerillo. Estas letras que crepitan son para ustedes. A él, que vive de torcer el pasado y adornarlo con villanos cuando el único traidor en su vida es él mismo. Para él, me gustaríaSigue leyendo «A todos los que quieren verme arder..»
Vernos ir por siempre
Verte ir por siempre.Y jugar a creer que Dios sabe que tiene que ser esta vez.Para entonces, verme ir por siempre. En la víspera de lo inevitable, no queda más que confesar la más perversa de las buenas intenciones. Ese juego de bailar sobre el escombro, de ser siempre en impares y de tentaciones compartidas.Sigue leyendo «Vernos ir por siempre»
No es tiempo
Todavía no es tiempo de desvestirnos a promesas ni de jugar a eternidades, pero podemos volver a contar las coincidencias que te trajeron hasta aquí. No es tiempo, más que de preguntarte otra vez, si no estoy cayendo muy pronto sobre las redes que trenzaste para mí con tu destino. Y de que me recuerdesSigue leyendo «No es tiempo»
Tengo ganas
Tengo ganas de romper mis propias reglas e inventarme excusas para las reglas que todavía no tengo y ya rompí. Me cansó el teorema que me inventa errante de las mismas azoteas. No me sirve ser viajera de pretérito, quiero descubrirme entre las nubes del futuro que persigo. El pasado ya no me entra enSigue leyendo «Tengo ganas»
Quédate conmigo
Dicen que por cada intersección, cada medio paso y cada titubeo, se desdobla otra vida. Siempre de las mismas huellas. Siempre idéntica en el camino recorrido pero con diferente desenlace. Y para siempre perdida en algún rincón del cosmos. En alguna vida que no es esta, apostamos lo perdido, la poca nada que llenaba nuestrosSigue leyendo «Quédate conmigo»
No me alcanza
No me alcanza: una quintilla gastada,media mano a media jugada,un tercio de poemas sin principio,seis cuartos de moneda corriente,un joto de picas, rey tulipány una golondrina que escapa del pecho floreado.No me alcanzanpara comprar todo lo que a ti te sobra. Pagaría lo que no tengoy hasta lo que no he jugadopor quemarme en elSigue leyendo «No me alcanza»
Anochecen tulipanes en tus ojos
Anochecen tulipanes en tus ojos. Lo que más duele es la verdad cuarto menguante, descubrir que no eres ni la mitad luz ceniza que prometes. Otro claro de luna, un cuerpo más sin órbita. No te atrevas a contarles que decidí nunca volver a donde ya no somos, que no decidí estar en donde nuncaSigue leyendo «Anochecen tulipanes en tus ojos»
Traslúcido remoto
No se necesita un catalejo para distinguir el traslúcido remoto tu penosa fascinación por la geometría corriente y los efectos secundarios de otros blancos el escozor por defecto y omisión del alquitrán. Tu profesión no es discutible, piloto de sótanos y evidente es su propiedad incompatible con mi pasatiempo de los jueves paracaídas de dardosSigue leyendo «Traslúcido remoto»
Yo les creo
Y a él le revolotean copos de pólvora sobre su bostezo. Y yo tengo tanto que perder. Hay púrpuras, que corren en la sangre del renglón, que ni yo he bebido, y no obstante, somos pasajeros de la misma copa en alta mar. Y yo, me amarraría las muñecas al firmamento inexplorado sin dudar, todo seaSigue leyendo «Yo les creo»
Tú entiendes
Es el mismo reloj de pared, con las manecillas muertas siempre en las diez y cuarto. La misma gente esperando en el apeador y siempre más muda que las vías. La misma voz en el altoparlante anunciando siempre un retraso en la línea dos. El mismo hombrecillo encorvado de uniforme azul siempre atendiendo la taquilla.Sigue leyendo «Tú entiendes»
¿Por qué odiamos el feminismo?: Desmintiendo los mitos anti-feministas más comunes.
Simpatices o no con el feminismo estarás de acuerdo conmigo en que el movimiento ha perdido credibilidad en los últimos años. Algunos tantos coinciden en que extravió la seriedad que lo caracterizó en sus inicios y en su segunda ola en el siglo XX. Aparentemente mutó de una Simone de Beauvoir que teorizaba sobre laSigue leyendo «¿Por qué odiamos el feminismo?: Desmintiendo los mitos anti-feministas más comunes.»
Es tiempo
Todas las flores murieron en mis manos, gasté veinte años huyendo de las ganas de huir y finalmente me cansé de buscarme en todos los lugares que no existen. Es tiempo de resbalarnos en las millas, perseguir los recuerdos que todavía no tengo. Bailar todo lo perdido. Averiar el termostato y amarrarnos fuerte al frío.Sigue leyendo «Es tiempo»